Escena 1: Llegada

- En Buda, no, esta es la primera vez que visito estas tierras, pero si he viajado por algunos lugares de Transilvania. - Su tono suena firme y seguro de si mismo, y se mueve con claro aire de superioridad, pero sin dejar de parecer altivo.

-Y vos, ¿viajó a tierras transilvanas alguna vez?- digo observando a mi compañera con curiosidad.
Bella ciudad, no como Francia, pero bella, aunque quizá el joven tenga razón, demasiada superstición, y algo tosca también

- No, tambien es la primera vez que estoy en esta ciudad y la verdad es que creo que es hermosa - le respondo a Mika. - Y usted Condesa, ¿que opina de la ciudad? - Miro a Alma esperando una respuesta

Observo a Jenell de reojo mientras camino a traves del mercado. - Nunca antes habia estado en este lugar y la verdad es que me resulta algo vulgar - digo con aires de superioridad

Justo antes de atravesar el mercado central, ois el sonido de una pequeña multitud: se está celebrando una subasta de esclavos. Sobre una plataforma, un hombre panzudo sostiene una cadena que sujeta a una cautiva vestida toscamente y de aspecto miserable, forzada a permanecer de rodillas ante él, con las manos a la espalda. Hay una hilera de cautivos encadenados a un poste cercano, con dos hombres montando guardia. La gente se congrega ante la plataforma, y algunos pujan por los esclavos. El escenario está iluminado por unas antorchas, pero la mayor parte del público y las calles cercanas permanece en la sombra.
Algunos miembros de la multitud casi parecen salteadores: hombres barbudos y bien armados, que han salido de las tabernas cercanas para disfrutar del entretenimiento.
Otros tienen el aspecto de mercaderes en busca de esclavos. Pero un hombre sobresale entre la muchedumbre. Obviamente un noble, como demuestran sus ropas y joyas, parece aburrido por la oferta, aunque claramente inquieto.
Quizá esté esperando que se ofrezca algo mejor.

- Oh, que deplorable, un mercado de esclavos, ¡que cutrez!- digo mirando con cara de asco a los reunidos en la subasta.
De pronto me fijo en el noble.
"Vaya, parece inquieto, quizá más de lo normal para tratar de comprar un simple esclavo, quizá no se trate de eso simplemente...

- La noche puede ser una trampa mortal, a veces sorprende al desprevenido con la cosa más insignificante.- digo con voz misteriosa.
- Tú crees, Vicky, ¿has sentido algo?
Miro alrededor de la subasta con un poco de intriga.




PD: Trato de advertir algo más, que esté fuera de lo común.

El miembro 'kherana' ha efectuado la acción siguiente: Lanzadados

'D10' : 9, 3, 4, 9

Jenell:


- No consigo entender a quien compra esclavos, con eso solo garantizan que en cuanto tengan ocasion atenten contra la vida de su "amo". Lo considero algo realmente estupido.

Al reparar en el inquieto caballero que llama mi atencion, le observo detenidamente para intentar averiguar a que esta esperando

Justo en el momento que estoy dispuesta a meterles prisa a mis compañeros, ya que los asuntos de los mortales no son nuestro problema y hemos de acudir a una cita, me percato del la existencia del noble. Preguntandome por que ha llamado mi atencion, me situo proxima a él oculta en las sombras, estudiando a ese mortal para intentar descubrir que trama o si me he vuelto paranoica

Observo la escena con curiosidad, "tal vez, podría aprovechar y hacerme con los servicios de un buen esclavo".
- Quizas deberiamos acercarnos más. - Digo mientras me acerco y contemplo debilmente al noble.

Excelente, mas retrasos, pienso. En fin, ya que estamos, y parece que Liam va a aprovechar la ocasion, no me vendría mal uno o dos esclavos.
- Creo que es una idea interesante, pero por favor, no nos demoresmos demasiado.

Cuando os deteneis para hacer una compra, la primera esclava es vendida y arrastrada fuera de la plataforma por su nuevo amo. Los ayudantes del subastador llevan a otra mujer: aunque está sucia y desastrada, su calidad es obviamente superior a la de la primera. Su pelo le cae en ondas de ébano a lo largo de la espalda, a pesar de que está enmarañado. Sus ojos tienen un aspecto oscuro y embrujado. Su harapiento vestido tiene un buen corte y está hecho con finas telas. Cuando se encuentra sobre la plataforma, el subastador pregunta:
"¿Qué ofrecéis por esta mujer? Virgen
e intacta, obediente y deseable."
Cuando el hombre se da la vuelta para contemplar a la multitud, la esclava alarga un pie y le pone la zancadilla. Después salta de la plataforma por el lado más cercano a vosotros. El subastador cae pesadamente, entre las risas del público, y la mujer huye hacia un callejón, moviendo frenéticamente los brazos a su espalda mientras intenta liberarse de sus ligaduras. Los guardias tardan unos momentos en emprender la persecución, y la gente parece tan divertida que no corre tras ella.

Esa hermosa y cautivadora mortal ha llamado mi atención, al ver el revuelo que se ha formado, sin esperar a nada más, salgo tras ella para darle alcance, e intentando interceptarlo antes de que lo hagan esos guardias bastardos. Debe ser mia.

Me sorprendo al ver la reacción de Markus, ¿como es posible que se involucre asi? No parece el tipo de cainita que se deja llevar por asuntos mortales de tan poca trascendencia. Movido más por curiosidad que por interes, salgo tras el para ver que se desarrollan los acontecimientos.

Sorprendida en exceso por los acontecimientos y la reacción de mis compañeros, me giro hacia el lugar en que se encontraba el noble, mientras pienso que no es posible que vayan en busca de la mortal. Sí, cómo sabía Vicky que algo sucedería, y por su comentario seguro que algo más trascendente está a punto de ocurrir.